La fábrica de alfombras cuenta la aventura que vive Alba, una niña de once años, junto a sus mejores amigos durante unas vacaciones de Semana Santa, las primeras que Alba vive sin su abuelo. Durante esos días comenzarán a ver unas extrañas nubes que captarán toda su atención. A partir de entonces los cuatro niños se esforzarán por descubrir juntos qué son en realidad aquellas nubes. Además Alba tiene otro misterio que resolver: ¿a qué se dedicaba su abuelo cuando trabajaba en la antigua fábrica de alfombras? Tras ir atando cabos, descubrirán que ambos enigmas están conectados entre sí y esto les llevará a conocer a unas maravillosas y adorables criaturas que esperaban ansiosas la visita de Alba.
En resumen, una fábrica abandonada, unas extrañas nubes y una pequeña llave heredada de su abuelo les conducirán a un fantástico país donde tendrán que cumplir una importante misión.
¿Qué han dicho de ella?
«La historia que cuenta La fábrica de alfombras no es la típica historia que podemos encontrar en cualquier cuento, os aseguramos que os sorprenderá su final, que su historia es muy original y que lo que más cabe destacar en ella son los valores que representa, donde podemos encontrar una familia unida, que se quiere y que se respeta como es la familia de Alba y unos amigos que harían todo los unos por los otros, un cuento donde lo más importante es la imaginación, el cariño, la familia y la amistad, perfecto para leer a los más pequeños y para disfrutar con ellos los más grandes, aunque también nosotros podemos disfrutar de él sin necesidad de hacerlo para mostrárselo a un niño, y es que la fábrica de alfombras es un cuento para disfrutarlo tanto pequeños como grandes y ambos disfrutaremos en la misma media de la historia, además La fábrica de Alfombras es un libro muy cortito, fácil de leer y dividido en 7 capítulos que no son de gran extensión, algo que es bastante bueno para que los más pequeños puedan leerlo sin dificultad y también ellos disfrutar con la lectura de esta magnífica aventura..» — Mundo Paralelo
«Pasé una tarde muy agradable junto a este cuento, siguiendo al grupo de niños en sus aventuras e investigaciones (…) hay fantasía, pero también hay el bello mensaje de que por más que pasen los años, no hay que perder la capacidad de soñar ni dejar de lado la imaginación (…) No solo para niños, sino sobre todo para los que ya crecimos. No dejemos de imaginar y fantasear, no importa la edad que tengamos.» — Sara Jaramillo