Como bien dice El Hematocrítico al final de este libro, el mundo sería un lugar más feliz si hubiera alguien como Doña Problemas en cada colegio.
¿Cómo que quién es Doña Problemas? ¿No la conoces? Entones sigue leyendo que te la voy a presentar.
Doña Problemas… o La Resolvedora o Hecatombe o la Catástrofes
O, simplemente, Carlota.
Carlota tiene diez años. En el interior de su mochila colecciona varias libretas (cada una con una función específica) y un montón de útiles más que le resultan fundamentales para cumplir con su misión: resolver todos los problemas que les surgen a los niños y niñas de su colegio.
Igual te improvisa un trabajo de ciencias que se te ha olvidado hacer, que te consigue un cromo imposible de la colección, te limpia la mochila tras un accidente o te ayuda a atreverte a mostrar quién eres en realidad.
Cualquier problema, de cualquier tipo, por muy complicado que parezca… háblalo con Doña Problemas, que ella encontrará la solución.
A todos los problemas.
Menos a uno que todavía se le resiste.
La única mancha en su expediente hasta el momento…
¿Por qué me ha gustado Doña Problemas?
Con esta novela, El Hematocrítico ganó el Concurso de Narrativa Infantil Vila D’Ibi en 2021. La compré en la Feria del Libro de este año (con dedicatoria incluida), pero no había podido leerla hasta ahora.
A medida que avanzaba, me iba pareciendo una lectura bonita, entretenida, protagonizada por personajes entrañables y con mucho corazón entre líneas. También bastante ingeniosa, por cómo la prota va solucionando cada asunto con una gran imaginación, astucia y, sobre todo, empatía. Pero al llegar al final… ¿podría haber sido más precioso y estar más lleno de ternura? Pues difícilmente. Reconozco que me emocioné un poquito.
¡Es que a esta Doña Problemas no se le resiste nada!
El narrador
Una cosa que me pareció muy original fue descubrir que el narrador no era quién pensé que sería cuando empecé a leer. Conocemos a doña Problemas a través de los ojos y la admiración que siente por ella su amigo (y leal ayudante) Juan.
Juan nos va contando cómo es el día a día de Carlota durante los recreos, cómo él la ayuda en su trabajo y como ambos incluso hacen horas extra fuera de la jornada escolar para solucionar los problemas más complicados. Pero Juan también nos cuenta cómo es Carlota como persona y cuáles son las cosas que más admira de ella desde el día que se conocieron.
Una historia llena de valores
Cada capítulo de Doña Problemas nos introduce en un nuevo encargo para Carlota. A través de las ingeniosas soluciones que propone Doña Problemas para cada una de las dificultades de sus compañeros, se muestra la importancia de la empatía, el compañerismo, la amistad y el respeto a los demás.
A nivel visual también es un libro precioso. La edición de Anaya viene en tapa dura y con ilustraciones de Paco Roca a página completa y a color.
Doña Problemas ha sido para mí una historia entrañable, tierna y divertida que recomiendo mucho.