No es ningún secreto que me encantan los libros de misterio. Y con Jessica Little no solo he leído para acompañar a los protagonistas en su aventura, sino que ¡he podido participar de manera activa en la investigación!
¿No te lo crees? Pues sigue leyendo y verás.
¿Quién es Jessica Little?
Jessica tiene doce años y vive en Londres. Es toda una preadolescente urbanita y por eso entra en pánico cuando sus padres le dicen que tiene que quedarse unos días en casa de su abuela mientras ellos están de viaje de trabajo.
La casa de la abuela de Jessica está en Cabot Mead, un aburrido pueblecito de la costa de Inglaterra que parece haberse quedado anclado en la Edad Media y donde lo más emocionante que ocurre, aparte de las reuniones para tomar el té a las cinco en punto, es que el alcalde por fin decida despertarse durante un minuto de sus siestas.
La parte buena es que la abuela de Jessica es la famosísima investigadora Angela Little, que en sus tiempos de juventud sirvió como inspiración para novelas y series de televisión, gracias a sus emocionantes andanzas. Jessica la adora y al menos estará entretenida escuchando la narración de sus antiguas aventuras.
¿He dicho que nunca pasa nada en Cabot Mead?
Pues me parece que he hablado demasiado rápido, pues Jessica tendrá que enfrentarse a ciertos misterios que están amenazando la estabilidad del pueblo. Gracias a sus habilidades de deducción, a los consejos de su abuela y a la colaboración de sus nuevos amigos, nuestra protagonista demostrará que es una digna heredera de la gran Angela Little.
¡Salvad a Graham Thoms!
En su primera visita a Cabot Mead, Jessica y sus amigos tendrán que ayudar a salvar a Graham Thoms.
¿Y quién es Graham Thoms?
Pues no te lo voy a decir.
Solo te diré que todo empieza con una vecina muy alterada porque alguien le ha robado un paquete que el mensajero le había dejado junto a la puerta de su casa.
A lo mejor te parece raro, pero es que en Cabot Mead nunca pasa nada y todo el mundo está acostumbrado a que le dejen los envíos en la puerta hasta que puedan recogerlos.
¡Y ahora están desapareciendo un paquete tras otro sin explicación aparente!
¿Quién está detrás de los robos? ¿Y qué tiene esto que ver con el secuestro del tal Graham Thoms, sea quién sea?
Pues para saberlo habrá que investigar.
El caso del camino invisible
Tras esa primera aventura, Jessica Little estaba deseando regresar a Cabot Mead. Quién se lo iba a decir a ella ¿eh?
Por fin sus padres vuelven a irse de viaje y a dejarla unos días en casa de su abuela. ¡Además es verano! Así que podrá pasar las vacaciones con sus amigos, disfrutando de la playa, de los helados y de las historias de la gran Angela Little.
O eso se pensaba.
Porque no es la única que ha regresado al pueblo.
El multimillonario aventurero Robert Cranston ha anunciado que va a instalarse en Cabot Mead, su lugar de origen. Pero, como multimillonario que es, no lo va a hacer en plan mortal, sino que se ha construido una mansión a las afueras, rodeada por un jardín enorme con laberinto incluido.
Todos los habitantes del lugar están revolucionados por la noticia de compartir calles con un personaje tan célebre.
Pero lo que llama la atención de Jessica y sus amigos es que el hombre dice estar decidido a descifrar el «gran misterio que esconde el pueblo desde hace siglos».
Por supuesto, no perderán ni un minuto antes de ponerse a investigar de qué misterio está hablando Cranston, qué tiene que ver su llegada con los cortes de agua que está sufriendo el pueblo y qué narices es un narval.
¿Por qué me ha gustado Jessica Little?
Jessica Little es una colección middle grade al más puro estilo de los libros de misterio y detectives clásicos, como las novelas de Agatha Christie y Sherlock Holmes, o la serie televisiva Se ha escrito un crimen.
Protagonizada por niños y ambientada en un pueblo en el que supuestamente nunca pasa nada, la serie nos presenta a un perspicaz protagonista de doce años que se topa con misterios que los adultos no parecen interesados en abordar y que ella debe resolver para devolver el orden a las calles de Cabot Mead.
La investigación sigue el ejemplo de esos detectives clásicos a los que Jessica tanto admira. La niña tiene una especial habilidad para fijarse en los detalles, usar el razonamiento deductivo y seguir los indicios hasta conseguir hilar la resolución del caso.
Las tramas son emocionantes, avanzan a un ritmo muy ágil, tienen giros inesperados, pistas falsas, acción y muchos toques de humor.
La amistad
Jessica llega al pueblo sin conocer a nadie, enfurruñada y llena de prejuicios hacia la vida rural. Sin embargo, enseguida conocerá a un puñado de niños con los que formará una pandilla imperfecta, llena de piques, pero unida por una amistad fuerte y verdadera.
Juntos, aprenderán poco a poco a respetar sus diferencias y a unir fuerzas, aportando cada uno de ellos sus fortalezas y ayudándose en sus debilidades; mostrando el valor del trabajo en equipo.
Los lectores también participamos
El ritmo de la trama, la intriga y las pistas que van apareciendo salpicadas en la historia invitan a los lectores y lectoras a ser partícipes de la aventura, a hacer sus propias conjeturas y señalar a su sospechoso.
¡Pero eso no es todo! ¡El libro invita a participar de verdad!
Cada uno de los tomos de la colección incluye un descodificador de pistas, con el que podemos descifrar algunos mensajes en clave que aparecen reproducidos en las páginas. De hecho, si lo hacemos bien, incluso nos enteramos de algunas cosas antes que los propios protagonistas.
A ti también te gustará si…
La colección de Jessica Little está recomendada a partir de ocho años.
Si te gustan las aventuras de detectives, con misterio, intriga y mucho sentido del humor, ¡no te la puedes perder!
